viernes, 22 de julio de 2016

La noche en que Watatumi volvió a subirse al podio en un concurso de preguntas y respuestas

Hace tres semanas. cuatro años después de la consagración, la formación original de Watatumi volvió a presentarse en el certamen organizado por la comunidad rusa en Vicente Lopez.
Pasaron muchas cosas en estos últimos cuatro años, pero el espíritu ganador de Watatumi estuvo presente.
El concurso tenía una base similar al que conocimos en 2012. Muchas categorías (¿10? ¿12?), muchas preguntas por cada una (entre 15 y 20) y 10 minutos para contestar cada una de ellas. La modalidad de este año incluía la posibilidad de usar un comodín para sumar 1,5 puntos que se podía usar en una sola categoría y un cuestionario de 10 ejercicios de lógica al cual podía tomarse toda la noche para contestar.
La noche arrancó complicada con un cuestionario de geografía muy ruso (Capital de Kosovo, río de Bulgaria) que pasamos discretamente, después vinieron los deportes (ahí no nos pudimos destacar tampoco!) hasta que nos acomodamos con literatura. En historia pedimos el comodín y ganamos.
Pero cuando llegó el turno de muerte súbita cometimos el error que nos costó la copa. Perdimos en la primera pregunta y no pudimos avanzar más.
Dejo el enunciado por si quieren contestarla (en no más de cinco segundos, por favor):
El papá de Jaimito tiene cinco hijos: Raco, Reco, Rico, Roco ¿y?
Caímos en la trampa como los más giles, y lo pagamos caro.
Porque en música, cine y ciencias (esta última, con algo de polémica) nos fue bastante bien. En arte estuvimos discretos, en actualidad ganamos también. Y en lógica nos fue mal.
Hubo, es cierto, varias desconcentraciones en el equipo y una embarazada un poco nerviosa (¡casi se precipita el parto!).
Esta vez terminamos terceros y logramos mantenernos arriba del podio.
Pero lo cierto es que todavía Watatumi tiene hilo en el carretel. ¡Allá nos vemos rusos! Hasta 2018, ¡prepárense!

lunes, 11 de julio de 2016

Las finales son una mierda

Iba a hacer una entrada que se llamara Los penales son una mierda, idea que todavía sostengo, pero la verdad es que hace mucho que no vemos una final de un tormeo de fútbol importante que sea entretenida, bien jugada, interesante.
Así, sin estudiar, me suena Eurocopa 2012, con baile de España. Pero los últimos mundiales, bodrios; últimas Copa América, bodrios.
El fútbol se volvió tan importante que en las finales nadie quiere arriesgar todo lo que sacrificó para llegar hasta ahí, y son mezquinas.
Mientras tanto, sigue siendo un deporte que se practrica con las mismas reglas que en el siglo XIX, cuando los jugadores llegaban al estadio en carretas tiradas por caballos.